Normas y estándares mundiales: Acción humanitaria

Una serie de normas y estándares internacionalmente convenidos sobre las cuestiones de género y acción humanitaria.

La Cumbre Humanitaria Mundial y el Gran Pacto

ONU Mujeres ha desempeñado un papel crucial al garantizar que la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas se hayan convertido en un tema preponderante en la primera Cumbre Humanitaria Mundial de 2016, en Estambul. El 20 por ciento de todos los compromisos asumidos por los Estados Miembros y las comunidades humanitaria y de desarrollo estuvieron dirigidos a las cuestiones de género. Estos compromisos orientarán la labor del sistema humanitario internacional de cara al futuro.

Como se señaló en el Informe del Secretario General para la Cumbre Humanitaria Mundial, la Cumbre confirmó que la igualdad de género, el respeto de los derechos humanos de las mujeres y las niñas y su empoderamiento en las esferas política, humanitaria y de desarrollo son responsabilidad universal. Los Estados Miembros de las Naciones Unidas, entidades del sistema de las Naciones Unidas, el sector privado y organizaciones de la sociedad civil coincidieron en la necesidad de apoyar a las mujeres y a las organizaciones de mujeres en roles de liderazgo en la labor humanitaria.

Durante la Cumbre Humanitaria Mundial, ONU Mujeres coorganizó la mesa redonda de alto nivel sobre “Mujeres y niñas: Catalizar la acción para lograr la igualdad de género”, que sirvió de marco para alcanzar 446 compromisos. Un total de 509 compromisos contraídos en el curso de la Cumbre estuvieron orientados a acciones específicas de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, incluidos cinco compromisos básicos hechos en el marco de la mesa redonda de alto nivel.

La Cumbre Humanitaria Mundial también produjo el Gran Pacto, un acuerdo pionero entre los 15 principales donantes y los 15 mayores proveedores de ayuda para reformar la financiación de la asistencia humanitaria. Como organismo coordinador del “Grupo Informal de Amigos del Género para el Gran Pacto”, ONU Mujeres está trabajando con todos los signatarios para garantizar que los compromisos contraídos en la Cumbre Humanitaria Mundial en favor de las mujeres y las niñas se integren en el curso de la ejecución del Gran Pacto. Tanto la Cumbre como el Gran Pacto destacaron la importancia de invertir en las mujeres y las organizaciones de mujeres y de facilitar su participación en la acción humanitaria desde una posición de liderazgo.

Un año después de la Cumbre, ONU Mujeres, en asociación con ActionAid y la Comisión de Mujeres Refugiadas, analizó los progresos realizados con miras a la consecución de los compromisos relacionados con el género que se contrajeron en la Cumbre.

Marco de Sendai

El Marco de Sendái para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015–2030, aprobado en la Tercera Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre la Reducción del Riesgo de Desastres, es un acuerdo voluntario no vinculante entre Estados miembros que reconoce que los Estados miembros, junto con otros interesados como los gobiernos locales y el sector privado, desempeñan una función en la reducción del riesgo de desastres. El marco apunta a reducir sustancialmente el riesgo de desastres y la pérdida de vidas, de medios de subsistencia, de la salud y de los activos económicos, físicos, sociales, culturales y ambientales. Específicamente, reconoce la importancia crítica de la dirección y participación de las mujeres en la formulación y gestión de todas las políticas, planes y programas sobre el riesgo de desastres, y reclama que se integre una perspectiva de género en todas las actividades de reducción del riesgo de desastres.

Como organismo miembro del Grupo Coordinador de Reducción del Riesgo de Desastres, ONU Mujeres desempeña un papel dinámico en la revisión del Plan de Acción de las Naciones Unidas para fortalecer la integración de la perspectiva de género en la reducción del riesgo de desastres.

La Declaración de Nueva York para los Refugiados y los Migrantes

La Declaración de Nueva York para los Refugiados y los Migrantes fue adoptada en el marco de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre Refugiados y Migrantes, de 2016. Es una expresión de “la voluntad política de líderes mundiales de proteger los derechos de los refugiados, salvar vidas y compartir la responsabilidad de los grandes movimientos a escala mundial”. Reconociendo los retos de la movilidad global, los Estados Miembros se han comprometido a tomar medidas para hacer frente a la vulnerabilidad que enfrentan las personas migrantes y refugiadas, así como a aumentar la cooperación internacional en apoyo de los países y las comunidades de acogida. La Declaración de Nueva York incluye compromisos para proteger los derechos humanos de todas las personas migrantes y refugiadas, reconociendo los derechos de las mujeres y las niñas y la importancia fundamental de su participación.

Integrar las perspectivas de género en la acción humanitaria

El Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas aprobó las resoluciones E/RES/2012/3, E/RES/2013/6 y E/RES/2014/2 en 2012, 2013 y 2014, respectivamente, que reconocen que la acción humanitaria puede fortalecerse mediante la incorporación de una perspectiva de género en todos los aspectos de la respuesta humanitaria. La resolución E/RES/2014/13 fue aprobada en 2014, y hace hincapié en el fortalecimiento de la coordinación de la asistencia humanitaria de emergencia de las Naciones Unidas

La Plataforma de Acción de Beijing de 1995 identifica medidas específicas que deben adoptar los gobiernos para prevenir y responder a la violencia contra las mujeres y las niñas. De manera explícita, llama la atención sobre la violencia sexual y de género que afecta a las mujeres en los conflictos armados y en situaciones de desastres naturales.

La Carta Humanitaria

En 2010 se actualizó la Carta Humanitaria y Normas Mínimas de Respuesta Humanitaria en Casos de Desastre para dotarla de una mejor definición de las normas mínimas de la acción humanitaria a fin de proporcionar una asistencia de mejor calidad a las personas afectadas por la crisis, especialmente las mujeres y las niñas. La Carta, aprobada por el principal cuerpo de coordinación humanitaria de las Naciones Unidas, el Comité Permanente entre Organismos, proporciona el contexto ético y jurídico de la labor humanitaria.

Resoluciones sobre las mujeres, la paz y la seguridad

Las resoluciones 1325, 1820, 1888, 1889, 1960, 2106, 2122 y 2242 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas promueven a las mujeres, la paz y la seguridad. Las resoluciones subrayan la importancia de proteger a las mujeres en situaciones de crisis y reconocen su papel en la resolución de conflictos.

Poner fin a la violencia contra las mujeres en tiempos de crisis

El Llamado a la Acción para la Protección contra la Violencia de Género en Situaciones de Emergencia es una iniciativa multisectorial apoyada por gobiernos, organizaciones internacionales y organizaciones de la sociedad civil para transformar radicalmente la forma en que se aborda la violencia de género en la acción humanitaria.

ONU Mujeres se ha comprometido a garantizar que los objetivos principales del Llamado a la Acción se vean reflejados en todo su trabajo en lo relativo a la acción humanitaria, en los ámbitos de la coordinación, la programación y el fomento de la capacidad.

Los desastres naturales

Al reconocer el desproporcionado impacto que tienen los desastres naturales sobre las mujeres, una diversidad de acuerdos internacionales hace referencia a la necesidad de fomentar la igualdad de género en el marco de la reducción del riesgo de desastres. De manera particular, la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, en los periodos de sesiones de 2012 y de 2014, aprobó las resoluciones 56/2 y 58/2, respectivamente, que reclaman la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en los desastres naturales; por su parte, el Marco de Acción de Hyogo para 2005–2015 establece que se “debe incorporar una perspectiva de género en todas las políticas, planes y procesos de decisión sobre la gestión de los riesgos de desastre, incluidos los relativos a la evaluación de los riesgos”; igualmente cabe señalar El Marco de Sendái para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015–2030.